Termina una etapa, comienza una búsqueda (Parte 1)

Escuchar artículo

“Un terremoto vital representa un periodo de caos y una transición vital representa el camino hacia adelante” Bruce Feiler, Transiciones

En esta primera nota que llamo “Termina un ciclo, comienza una búsqueda” quiero compartir las primeras fases del proceso de transiciones vitales en la vida profesional, desde la detección del agotamiento de un ciclo, la decisión de soltar y movilizarnos, hasta el compromiso y experimentación del proceso de búsqueda del nuevo capítulo. 

La presento como momentos, como parte de un mundo “no lineal ni cronológico”.  Aceptemos que los momentos se superponen y seamos felices con ello.

Momento 1: entender si “este ciclo se está agotando”

En su charla TED, Emily Smith nos presenta que, a pesar de que la vida está mejorando objetivamente según casi todos los estándares imaginables, más personas se sienten desesperanzadas, deprimidas y solas. Tarde o temprano, creo que todos nos preguntamos: ¿Hay algo más en la vida que ser feliz? ¿Y cuál es la diferencia entre ser feliz y tener un sentido en la vida?

Y te preguntarás: ¿Por qué comenzar este artículo con una pregunta tan profunda?

Porque debemos diferenciar entre la necesidad de refrescar y revitalizar nuestra realidad, aunque a veces resulte agobiante, y comprender cuando un ciclo de nuestras vidas se ha agotado.

Como analista organizacional he utilizado diversos modelos de diagnóstico y detección de agotamiento de ciclos corporativos, que obligan a un nuevo diseño organizacional de los modelos de negocios y operativos, así como a reescribir un nuevo “contrato laboral/emocional” entre la organización y las personas, y ayudarlas a ser exitosas ante los nuevos desafíos. 

A los fines de esta nota me centraré exclusivamente desde la óptica de las personas

¿Qué razones nos permiten advertir un agotamiento de ciclo?

Para responder a esta pregunta, permítanme agruparla en cuatro tipos:

  • Tipo 1: Hechos objetivos de la relación laboral: por ejemplo, fin del contrato laboral, retiro por edad de la organización, plan de retiro voluntario, cambio de las condiciones laborales -mudanza, horarios, trabajo híbrido, etc.-
  • Tipo 2: Mi empresa ya no es la misma: cambio de supervisores, reestructuración que modifica mi puesto o mi carrera, cambio en el propósito o modelo de gestión, clima laboral y relaciones tóxicas, cambio brusco en las expectativas de la organización, evolución esperada de mi puesto distinta a mis expectativas, objetivos desmesurados, escenario de evolución de mi empresa, crisis sostenidas, estancamiento estratégico de mi organización, etc.
  • Tipo 3: Mi trabajo ya no me atrae: por ejemplo, cuestionamientos profundos de propósito y significado, desbalanceo de la armonía en la relación trabajo-vida personal, desmotivación, no me siento considerado en las actividades más atractivas, rutinas agobiantes, sensación de estancamiento profesional, espíritu emprendedor no contenido por mi organización, brecha entre mi propósito de vida y como mi organización me permite lograrlo, etc.

  • Tipo 4: Cambios en mi vida personal: por ejemplo, replanteos de estilo de vida, graduación universitaria, casamiento, nacimientos, enfermedades, separación, fallecimientos de seres queridos, etc.

Para guiar nuestro autodiagnóstico podemos hacernos algunas preguntas:

→ Si hay Hechos objetivos de la relación laboral ( tipo 1), ¿estoy poniéndome en movimiento con el tiempo necesario para un buen cambio?

→ Si hay mi empresa ya no es la misma (tipo 2), ¿cómo impactan en mis expectativas y mi relación con mi organización? ¿se mantiene el atractivo y las condiciones para continuar allí? ¿Esta situación genera estímulos tipo 3 (Mi trabajo ya no me atrae) relevantes? ¿Los podemos salvar?

→ Si la situación es Mi trabajo ya no me atrae (tipo 3), ¿estamos ante una oportunidad de resignificar mi relación con la organización y re-lanzarla o siento que es agotamiento real porque lo que estaba próximo ya aparece alejado y las brechas aparecen estructurales?

→ Si se combinan cualesquiera de ellos con cambios Cambios en mi vida personal (tipo 4), ¿estamos ante una crisis temporal o hay que resetear la situación?

Finalmente, ¿soy consciente que me corresponde a mí liderar el proceso de discernimiento que tengo por delante?

Conclusiones: “Entender si este ciclo se está agotando”

Tras hacernos las preguntas propuestas, es posible que lleguemos a dos conclusiones:

Primera opción: Hay una muy buena posibilidad de generar una realidad superadora dentro de mi organización, pero tendré que desarrollar un proyecto de resignificación del vínculo.  Este tema lo trataremos este año en una nota llamada “El arte de resignificarnos”.

Segunda opción: Concluyo en que esta etapa se ha agotado y debo poner en marcha los procesos de Aceptación y Búsqueda. 

A los efectos de describir completo el ciclo de Transición, vamos a continuar desde esta segunda conclusión.

Momento 2: De aceptar se trata

Bruce Feiler nos ayuda a comprender mejor aspectos de este proceso, cuando establece en su libro Transiciones: “El hecho simple es: la mayoría de las personas se resisten a las transiciones. Negamos, evitamos, retrasamos, resentimos. Quizá sea porque nos gusta cómo eran las cosas o porque tememos como puedan llegar a ser; quizá sea que simplemente no nos gusta el cambio.

“La aceptación es difícil precisamente porque implica trazar una línea que no solemos querer trazar y entrar en una realidad en la que no solemos querer entrar. Pero también es difícil por otra razón: nunca ocurre aislada. Es parte de una secuencia de emociones más extensa (miedo, tristeza, vergüenza, culpa, enfado, soledad) que nos deja la sensación de sentirnos inertes cuando pasamos por tiempos de cambio”.

Pero también, para este momento nos comparte ciertas herramientas que nos permiten gestionar estas emociones:

  • Comparar (un futuro con incertidumbres por resolver versus un presente con evidencias de agotamiento)
  • Escribir (listar mis temores es verlos objetivamente y poder valorarlos, y poder mitigarlos)
  • Ponerse a trabajar (combatir la inmovilidad con acciones concretas, que veremos en el ciclo de búsqueda. ¿Por qué temer algo que aún tengo por conocer, si puedo conocerlo primero?
  • Enfrentar (el miedo es innato, la valentía se puede aprender)

Momento 3: buscar para soltar

¿Estoy dispuesto a soltar? ¿Si no hago espacio como podría entrar lo nuevo? ¿A qué tipo de eventos, reuniones o actividades podría dejar de asistir o replantear mi enfoque de participación para oxigenarme? ¿Qué tengo pendiente para delegar?

Feiler presenta que en los períodos críticos de transición las personas hacen dos cosas: mudan hábitos, rutinas, formas de ser, ilusiones y sueños y por otro lado crean nuevos hábitos, aptitudes, habilidades, talentos y formas de expresión. Renunciar a una identidad es una condición necesaria para dar paso a la nueva identidad que nos espera.

Joseph Campbell llamó a esta parte del camino del héroe “cruzar el umbral”, cuando el héroe abandona el mundo ordinario y se embarca en una aventura.

Les propongo que abordemos el proceso de búsqueda como una aventura:

  • Donde podamos ponernos en rol de descubrir, no es imprescindible saber
  • Donde no tenemos que tomar ninguna decisión, ni existen plazos apremiantes
  • En los que lo racional y lo emocional (sentir / pensar) tienen que estar más conectados que nunca
  • Donde perseguimos tanto conocer como entusiasmarnos, comprobando si queremos saber más

Es en esta dinámica que el “soltar” tendrá menos barreras, y que comenzaremos a procesar las emociones negativas, mezclándolas con positivas.

Y daremos lugar en la siguiente nota, «De una búsqueda creativa a una nueva etapa en tu vida», al Momento 4: Probar y Crear.

Como dice Paulo Coelho, «Cada uno de nosotros tiene su propio camino, y solo se revela al caminar»

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *